Perfume de mujer. Elegir perfume.

Se necesita una mirada que paralice, una sonrisa que enloquezca y el sutil rastro de un aroma perdurable.

Desde hace miles de años los hombres y las mujeres responden positivamente ante el estímulo de un buen aroma, ya sea de una flor, de una bebida, o del que emana del cuerpo de otra persona.

Suele suceder que un determinado aroma nos hace recordar hechos que nuestra memoria ya había olvidado. Esto refuerza la importancia de los olores en nuestra vida diaria, devolviendo al presente la magia de los momentos gratos e inolvidables.

La principal función de un perfume consiste en estimular la atracción de los demás hacia uno. Es llevar a la otra persona al espacio donde la voz de mando no la tiene la razón sino los sentidos, exactamente el del olfato.

La experimentación directa es la mejor manera de escoger cuál o cuáles perfumes son los más afines con tu piel. Y para tomar la decisión final, lo mejor es que realices la prueba con diversos aromas y fragancias.


El organismo de cada mujer es único. Por esta razón, hay perfumes que reaccionan bien sobre un tipo de piel, expidiendo una fragancia seductora, mientras que cuando los usan otras mujeres no producen el mismo efecto agradable.

Antes de escoger tal o cual fragancia, realiza primero una prueba sobre tu propia piel. Así sabrás con exactitud si es la que más te satisface, o si debes probar con otras hasta encontrar la ideal.

Probar un perfume

1. Coloca una muestra de perfume sobre la parte interior de tu muñeca izquierda, y la muestra de otro sobre la muñeca de otro.
2. Espera unos minutos hasta que se evaporen los disolventes y quede el aroma de las esencias.
3. Acerca tu nariz a la muñeca izquierda. Dejar pasar unos minutos y haz lo mismo con la muñeca derecha. Así empezará a darte cuenta de cómo responde tu piel a cada uno de los perfumes.
4. Sin embrago este es el primer paso. Para realizar la elección final deberás esperar por lo menos dos horas, luego de las cuales volverás a comparar el olor de cada una de tus muñecas.
5. Al hacer probarás la auténtica reacción de los perfumes sobre tu piel, y ahora sí podrás elegir uno de los dos, o rechazarlos juntos y realizar una nueva prueba con otros dos.
6. El proceso puede parecerte dispendioso, pero es necesario que lo hagas completo si deseas elegir el perfume que mejor combine con tu organismo, personalidad y estilo de vida.
7. Una de las razones por la que es necesario colocar una muestra de un perfume en la muñeca, y apreciar la fragancia varias horas después, consiste en que al hacerlo se prueba la persistencia del aroma.

Elegir perfume

Al elegir un perfume, no cometas el error de probar varias muestras colocándolas en el mismo sitio de tu cuerpo. Inevitablemente las fragancias se mezclarán y te harán tomar decisiones erróneas en cuanto a la que más te agrada.

Cuando estés haciendo la elección de tu perfume, no olfatees uno y en seguida otro, pues cada fragancia permanece en tu nariz por unos minutos, y si acercas de inmediato otro perfume, no podrás apreciar con nitidez el auténtico olor de cada fragancia sobre tu piel.

Al escoger un perfume, no lo hagas jamás oliendo una fragancia directamente del frasco que lo contiene. Siempre debes extender una pequeña muestra sobre tu piel. Esta es la única manera de conocer el olor exacto que expedirá tu cuerpo después de que se mezcle el olor del perfume con el olor de tu piel.

Con el fin de provocar la sensación de que la fragancia seductora del perfume brote de todo tu cuerpo, te aconsejamos aplicar una pequeña cantidad en los siguientes puntos claves:

• Detrás de las orejas.
• En el cuello.
• Toda la nuca.
• Ambos hombros.
• Reverso de las muñecas.
• Entre los senos.
• En los muslos.
• En los codos.

Recuerda que el principio básico del embellecimiento de una mujer consiste en reforzar sus encantos, pero jamás en sustituirlos.

Guíate por el mismo principio al momento de aplicar el perfume, éste debe estimular en los demás curiosidad y atracción hacia ti, no hacia tu olor.

Pero si exageras en el uso de las fragancias, lograrás el resultado contrario; éstas opacarán tu propia imagen, y los demás verán en ti una mujer artificial.

Éstos son el resultado de pacientes investigaciones que realizan los fabricantes. Por tanto, no es nada aconsejable que mezcles el contenido de dos o tres frascos. Lo que si hacer es aplicar una fragancia en tu piel, dejarla evaporar, y luego colocarse otra en el mismo punto.

Mantenlos protegidos de la luz y alejados de los sitios calurosos. Es la mejor forma de hacer que las fragancias duren más. El gabinete del baño es un lugar ideal. Existe otro sitio apropiado: es el cajón donde tú guardas la ropa interior, con el fin de que la cercanía le contagie a ésta el aroma del perfume.