Son muchos los matrimonios que, aun deseándolos, no tienen hijos, lo que en la mayoría de los casos es causa de gran preocupación y algunas veces de desavenencias conyugales.Este problema es tan importante mucho más teniendo en cuenta que los procedimientos curativos naturales pueden resolver el asunto en muchos casos, consiguiendo así descendencia en matrimonios estériles que la deseaban. En estos últimos tiempos, los conceptos sobre este asunto han variado radicalmente.
Hoy se tiene una visión mucho más clara y acertada que antes, de las causas de la falta de hijos. Llama mucho la atención el que, dejando aparte los deseos de los cónyuges y las circunstancias y condiciones de su vida, hay matrimonios con muchos hijos y otros con sólo uno. Finalmente, ciertos matrimonios, por más que se esfuercen y acudan a diversos recursos, no consiguen tener descendencia.
También es evidente que en muchísimos casos, al parecer, no existe motivo aparente que explique la falta de sucesión. Los cónyuges gozan de perfecta salud, son jóvenes, el varón es potente y ambos cónyuges desean tener hijos, y sin embargo llegan a la vejez sin haberlos conseguirlos.
Otro punto que ha llamado la atención de los investigadores es que, personas que no han tenido descendencia en su primer matrimonio, la consiguen en segundas nupcias, o viceversas, que habiéndola conseguido en su primer matrimonio, no la consiguen al casarse nuevamente, y esto ese valido tanto para la mujer como para el hombre.
Causas de la esterilidad en la mujer
Hoy en día los especialistas han llegado a importantes conclusiones, que son las siguientes:Las causas de la esterilidado infecundidad son muchas, quizás tantas como personas existan, cada caso es único. No todas son de igual fuerza, pero se complementan entre sí, y si la esterilidad resulta en la mayoría de los casos del concurso de varias causas.
En el terreno de la esterilidad hay todos los grados posibles: desde la infecundidad absoluta, incurable, a la infecundidad ligera, fácil curable, hay toda una serie de estados intermedios.
La investigación moderna ha aclarado más las cosas: antes, todos los casos se atribuían bien al marido o bien a la mujer. Hoy se sabe que tanto el hombre como la mujer pueden poseer factores favorecedores de la fecundidad u otros factores que la disminuyan. Del predominio de unos u otros de estos factores resulta el índice de fecundidad individual del hombre o de la mujer.
Así, una mujer por sí sola será muy fecunda si posee abundantes factores favorecedores y ninguno adverso. Otra mujer podrá ser estéril con sólo poseer un factor fuertemente desfavorable a la fecundidad, aunque tenga muchos factores favorecedores. Lo dicho a este respecto para la mujer es aplicable también al varón.
Si los factores favorables del varón son muchos, podrá tener descendencia con una mujer de fecundidad mediana, y muchos hijos con una mujer fecundidad fuerte. Del mismo modo una mujer con muchos factores favorables podrá tener algunos hijos con un varón de fecundidad débil y muchos hijos con un varón de fecundidad fuerte.
La abundante fecundidad de un cónyuge puede compensar la débil fecundidad del otro. Igualmente, al unirse un marido y mujer, ambos de fecundidad mediana, el resultado podrá ser pocos hijos o ninguno.
Desde luego, es improbable la descendencia cuando ambos cónyuges tengan pocos factores favorables. De todos modos, es imposible, por fuerte que sea la fecundidad de uno de los cónyuges, que está venza la esterilidad absoluta del otro.
Esterilidad absoluta significa que hay un obstáculo que impide del todo, de la fecundación, como explicaremos más adelante. Por tanto esta influencia mutua de las fecundidades respectivas del varón y de la mujer sólo merece ser tenida en cuenta mientras no existan en ninguno de los dos causas de esterilidad absoluta. Para tranquilidad de muchos matrimonios debemos decir que los casos de esterilidad absoluta llegan tan sólo a un %15 entre todos los casos de esterilidad.
Como hemos dicho, pueden existir varias causas de esterilidad. Las dividiremos en cuatro grupos:
Enfermedades generales: se trata de enfermedades del organismo, que repercuten sobre los genitales femeninos, en particular sobre los ovarios, o bien perturban la circulación de la sangre, con lo que la nutrición de estos órganos es deficiente.
Las enfermedades que más frecuentemente perjudican los órganos de la procreación, sobre todo si no son tratadas y curadas debidamente, son: sífilis, tifoidea, paludismo, pulmonía, inflamación de las parótidas (paperas), fiebre de malta, difteria, artritismo, anemia, diabetes, enfermedades de las glándulas, obesidad, tuberculosis, enfermedades del hígado, del corazón, etc. Algunas de estas enfermedades, como la tifoidea y la pulmonía, pueden dejar una esterilidad pasajera.
Otras como la fiebre de malta y la inflamación de las parótidas (paperas), pueden dejar una esterilidad definitiva o incurable. En el caso de enfermedades crónicas puede conseguirse la curación de la esterilidad tratando la enfermedad causante, siempre que los daños causados en los ovarios no sean irreparables.
Alimentación apropiada para la infertilidad
Alimentación deficiente o antinatural: pueden ser causas de esterilidad en mayor o menor grado: la desnutrición, sobre todo si acompañada de un excesivo desgastes, falta de sueño reparador, vicios, etc.
Alimentación excesiva, que conduce a la obesidad, ejercicio físico. Pobreza en vitaminas: la alimentación pobre en vitaminas es una causa importante de esterilidad, más todavía en la mujer que en el hombre. La escasez de vitaminas, antes de la pubertad, puede dificultar el desarrollo de los ovarios y la matriz.
En la época de la pubertad puede ocasionar otros diversos perjuicios. Y desde la pubertad hasta el cese de la regla puede ser causa de que se produzca lo que se llama “aborto habitual” en cada regla, por dificultad de anidación del huevo en la matriz, o bien dar origen a verdaderos abortos y partos prematuros. Las vitaminas más importantes a este respecto son la B y E.
La pobreza en hierro, causante de anemia, puede también originar esterilidad en la mujer o en el hombre.
Causas patológicas
Esterilidad por enfermedades de las glándulas: gran parte de casos de esterilidad en la mujer son debidos a alteraciones de las glándulas que fabrican los elixires de vida: ovarios, tiroides, etc.
Resultan de infecciones que ya hemos mencionado antes y que han dañado a una o varias de estas glándulas afectadas, ya no alcanza el desarrollo debido. Las alteraciones de las glándulas pueden resultar también de intoxicaciones de largo tiempo. La hipófisis tiene desde este punto de vista una importancia capital, puesto que es las glándulas de secreción interna que preside las funciones del ovario y su desarrollo.
Cuando el ovario no se desarrolla bien puede ser incapaz de dar óvulos, y sin óvulos la fecundación no es posible. La falta de desarrollo del ovario puede manifestarse entre otras cosas por aspecto infantil, frialdad sexual, falta de reglas, menstruación escasa, esterilidad. La alteración de las glándulas de secreción interna puede producir un tipo de mujer estéril con rasgos acusados de masculinidad.
La diabetes es una causa de esterilidad poco frecuente, por ser más corriente la diabetes en las mujeres de edad madura.
La mujer diabética es raro que quede en cinta, y en caso de embarazo es frecuente el aborto o el parto prematuro (sietemesinos).
Ovarios: la insuficiencia (funcionamiento escaso) del ovario es causa frecuente de esterilidad en la mujer. La insuficiencia del ovario puede ser debida a mala constitución y en tal caso todos los órganos genitales están incompletamente desarrollados.
También puede ser producida por infecciones generales o locales que hayan perjudicado al ovario, por intoxicaciones o por la acción sobre el ovario de otras glándulas de secreción interna alteradas.
En estos casos hay falta o trastorno de la producción de óvulos, insuficiencia de la función del ovario, malestar general, cansancio, escasez de reglas o reglas dolorosas, sensación de frio, sofocaciones, manchas en la piel y desarrollo excesivo de grasas de medio cuerpo para abajo. Otras enfermedades del ovario también puede ser causa de esterilidad.
Esterilidad por causas psíquicas (mentales y emocionales) una forma de esterilidad recientemente descubierta es la debida a causas psíquicas, es decir, causas nacidas en el mundo mental y emocional de la mujer. Tales son, por ejemplo, la angustia, la inquietud, las preocupaciones, los conflictos, el miedo, la tristeza, etc.
El mecanismo de esta esterilidad es el siguiente: los factores señalados producen un estrechamiento (espasmos) nervioso de las trompas o tubos uterinos, que cierra el paso al óvulo y a los zoospermos, impidiendo la fecundación. El resultado es el mismo que si existiera una obstrucción orgánica de las trompas, con la única y fundamental diferencia de que la obstrucción es de origen psíquico.
Tratamiento de la esterilidad
Desde el punto de vista del tratamiento debemos dividir los casos de esterilidad en la mujer en dos grupos:El primer grupo está integrado por aquellos casos en que un tratamiento natural y bien dirigido puede llegar a curar por completo la esterilidad por incorregible que parezca y por antigua que sea.
El segundo grupo comprende los casos en que se requiere la intervención del especialista para tratar determinadas lesiones locales y defecto de los genitales femeninos, o para suprimir obstáculos al paso del semen.
Del mismo modo hay casos de esterilidad que no son absolutos, pero que no obstante requieren un tratamiento natural muy largo y seguido, hasta que se consiga modificar profundamente el organismo, y pueda, y así curar la esterilidad en la mujer.
La consecuencia práctica que se deduce de todo esto es la de que lo primero que hay que hacer en todo caso de esterilidad, es acudir al especialista para que haga un reconocimiento lo más completo posible, y procure corregir los defectos y lesiones, si los hay.
Si no los hay, investigar las otras posibles causas de esterilidad parda evitar que la persistencia de la misma haga infructuosas todos los esfuerzos de curación. Para evitar la acción de las causas es preciso conocerlas.
Aparte del tratamiento local y de combatir las causas, el tratamiento por la medicina natural es general en absoluto en todo los casos de esterilidad, ya que tiene por fin regenerar el organismo, tonificarlo, purificarlo y endurecerlo.
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